La visita de Scott Bessent y las condiciones en las que se realiza configuran un claro respaldo a la gestión de Milei, quien asoma como el principal aliado de la gestión Trump en la región.
En un contexto global marcado por tensiones comerciales y transformaciones estructurales en la economía argentina, la llegada del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, a Buenos Aires este lunes marca un hito diplomático y financiero. La visita no solo reafirma el respaldo del gobierno de Donald Trump a la administración de Javier Milei, sino que también abre la puerta a posibles acuerdos económicos estratégicos, incluido un préstamo especial para reforzar las reservas y reducir la dependencia de China.
Bessent, considerado el quinto en la línea de sucesión presidencial de EE. UU., no realiza una gira regional, sino un viaje exclusivo a Argentina, lo que acentúa la relevancia del encuentro. Su arribo se da en el primer día sin cepo cambiario y tras el lanzamiento del nuevo programa económico acordado con el FMI, lo que sitúa al país en el centro de la agenda internacional.
Reuniones clave con Milei, Caputo y empresarios influyentes
La agenda de Bessent en Buenos Aires incluye un encuentro con el presidente Javier Milei y el ministro de Economía Luis Caputo, seguido de un almuerzo con CEO de multinacionales en el Palacio Bosch, residencia del embajador estadounidense. También se esperan reuniones con el equipo económico argentino.
Lo acompañan figuras de peso como Robert Citrone, fundador del Grupo Discovery y viejo conocido de Caputo; Matt Schlapp, presidente de la CPAC; y Soledad Cedro, CEO de CPAC Argentina. La presencia de estos actores subraya la búsqueda de alianzas económicas, geopolíticas y comerciales sólidas entre ambos países.
Un posible préstamo de EE. UU. y el fin del swap con China
Uno de los ejes centrales de la visita sería la posibilidad de un préstamo millonario por parte de Estados Unidos a través del Exchange Stabilization Fund (ESF), una herramienta que ya fue utilizada para asistir a México en 1995 y a Uruguay en 2002. De concretarse, podría ayudar a cancelar el swap con China, por casi USD 18.000 millones, que representa más del 70% de las reservas brutas argentinas.
Esta iniciativa formaría parte de una estrategia geopolítica de Washington para reducir la influencia china en América Latina, donde Argentina ocupa un rol estratégico por sus recursos naturales y ubicación.
Acuerdos por minerales críticos y posible flexibilización arancelaria
Otro punto central de la visita de Bessent sería la negociación de un acuerdo sobre minerales críticos, como litio y tierras raras, esenciales para la industria tecnológica global. Argentina, con vastas reservas en el norte del país, es vista como un socio clave en este campo, como ya lo es Ucrania, donde Bessent cerró acuerdos similares semanas después de asumir.
En paralelo, se baraja la posibilidad de reducir o eliminar aranceles para ciertos productos argentinos, lo cual reforzaría la cooperación bilateral. Sin embargo, este punto se analiza con cautela debido a la reciente «tregua arancelaria» de 90 días anunciada por Trump, que busca estabilizar las negociaciones comerciales globales.
Quién es Scott Bessent: del mundo financiero a la política global
Licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad de Yale, Scott Bessent desarrolló una sólida carrera en las finanzas globales. Fue parte del Soros Fund Management, fundó su propio hedge fund (Key Square Group) y regresó al grupo Soros antes de asesorar a Trump.
Su cercanía con figuras argentinas como José Luis Daza (viceministro de Economía) y Pierpaolo Barbieri (fundador de Ualá) lo posiciona como un actor bien conectado en el ecosistema financiero local. Fue clave en el financiamiento inicial de la fintech argentina, lo que demuestra su interés de largo plazo en el país.
Argentina se reposiciona en la agenda económica de EE. UU.
La visita de Scott Bessent representa mucho más que un gesto diplomático. En un momento de definiciones clave para la política económica argentina, su presencia podría traducirse en nuevas líneas de crédito, acuerdos comerciales estratégicos y una reconfiguración de alianzas geopolíticas. Si se concreta un préstamo para reemplazar el swap con China o un pacto por minerales críticos, Argentina podría no solo aliviar su situación financiera, sino también reafirmarse como socio clave de Estados Unidos en la región.
Con el respaldo explícito de la administración Trump, Milei fortalece su perfil internacional mientras busca consolidar el nuevo modelo económico. La mirada ahora está puesta en los anuncios que puedan surgir tras las reuniones privadas, que podrían marcar un antes y un después en la relación bilateral.