El Tribunal de Cuentas comenzó la mudanza a su nuevo edificio, dejando atrás su funcionamiento en seis locaciones alquiladas, que demandaba un gasto de $20 millones mensuales en concepto de alquileres por las distintas oficinas. Con la sede única, se estima un ahorro anual de $240 millones, resultado de la eliminación de contratos de alquiler y la reducción de gastos operativos.

Además, desde el Gobierno indicaron que se cederá el edificio histórico del TC al Poder Judicial, que lo incorporará a su infraestructura institucional.

De esta manera, se evita la necesidad de nuevas inversiones judiciales y se estima que, gracias a esta incorporación, el Poder Judicial también generará un ahorro anual de aproximadamente $180 millones en concepto de alquileres.