El contundente motivo por el que cada vez más perros llevan pañuelos amarillo
En Dinamarca, algunos perros empezaron a llevar cintas o pañuelos amarillos como parte del proyecto Yellow Dog, una iniciativa nacida en Suecia y que se extendió a más de 40 países. Este proyecto tiene como objetivo facilitar la comunicación entre las mascotas y las personas para promover una convivencia más respetuosa.
La idea detrás de este distintivo es sencilla: los perros que llevan una señal amarilla no deben ser abordados ni por personas ni por otros animales.
El propósito es evitar situaciones incómodas o potencialmente peligrosas, ya sea porque el perro tiene problemas de salud, es asustadizo o está en proceso de entrenamiento. De esta forma, el pañuelo amarillo actúa como una señal de advertencia que invita a los demás a mantener distancia.
Cuál es el origen del Yellow Dog Project
La fundación Yellow Dog Project se lanzó en 2012 con la intención de fomentar un acercamiento adecuado entre los perros y el mundo exterior. Además, educa a las personas, especialmente a los niños, sobre cómo interactuar de manera segura con las mascotas.
En poco más de una década, este proyecto logró ganar mucho terreno en países como Dinamarca y Reino Unido. A esta medida, podría llegar pronto a Argentina e incluso convertirse en una tendencia global.
Qué significa la cinta o el pañuelo amarillo
Este símbolo de color amarillo en un perro puede indicar diversas situaciones, como problemas de salud, nerviosismo o que el animal está en recuperación de una cirugía.
También puede señalar que el perro tuvo experiencias traumáticas, está en celo o simplemente necesita espacio para entrenar. Cabe destacar que la cinta o pañuelo no significa que el perro sea peligroso, sino que requiere atención especial.
Otros colores y sus significados
El “sistema de lazos” no se limita al amarillo. Existen otros colores con significados específicos. Por ejemplo, el naranja señala que el perro no debería interactuar con otros perros, mientras que el rojo indica que se debe tener precaución.
El blanco es para perros discapacitados, el violeta sugiere que no deben ser alimentados, y el azul es utilizado por perros de servicio. En cambio, el verde indica que el perro es sociable.
Este sistema de colores es una herramienta útil para garantizar una mejor convivencia y seguridad en la interacción entre perros y personas.