Lo plantearon en una reunión de la que participaron representantes del Gobierno y la UTA.

En una reunión que mantuvieron representantes de las empresas de transporte público, autoridades del Ministerio de Transporte y la Unión Tranviaria Automotor, los empresarios volvieron a plantear una actualización de la tarifa al señalar que la última suba fue en abril de este año. En este marco, el pedido es que el costo del mínimo suba a $1.000, lo que implicaría una suba de casi el 45%. Al cierre de esta edición, las partes seguían negociando y no había ninguna respuesta al planteo de los empresarios.

Las empresas operadoras del transporte público vienen pidiendo una actualización hace varias semanas. De hecho, a mediados del mes pasado el ministro de Integración Regional, Logística y Transporte, Eduardo Andrada, ya había adelantado que los empresarios estaban pidiendo “hablar un poco de las tarifas”, teniendo en cuenta que ya hubo aumentos en varios distritos.

En Catamarca, actualmente el boleto mínimo cuesta $700 y la última actualización se realizó en abril de este año, cuando costaba $250. Según había explicado en ese momento Andrada, las empresas cuestionan que lo que ellos llaman “la tarifa técnica” cuesta igual en Catamarca, en Córdoba y en Buenos Aires, “por lo que implica el costo de mover el colectivo”.

Desde el Gobierno indicaron que en la provincia aproximadamente el 50% de los usuarios del servicio público tiene algún tipo de descuento, por lo que el boleto se termina pagando cerca de $300.

Aportes

Las empresas ya habían planteado la necesidad de llevar a $1.000 o $1.100 el precio del boleto mínimo en marzo de este año, pero desde el Ejecutivo se rechazó esa posibilidad y se realizó una serie de aportes para subsidiar el servicio y evitar el incremento. Sin ir más lejos, en julio el Gobierno destinó mediante una resolución del Ministerio de Transporte (nº743) un subsidio a las empresas por $1.790.000.000 correspondientes al tercer trimestre del año.

Este último aporte realizado por la Provincia se suma a los $1.298.341.878,46 que debió desembolsar en agosto para solventar el costo del incremento tarifario en el transporte público de pasajeros con la finalidad de asegurar la continuidad del Boleto Estudiantil Gratuito, que además no cuenta con el aporte que se hace a los municipios que no cuentan con SUBE, a quienes también en agosto les desembolsaron $1.012.103.361,49 para el pago de este servicio.

Discusión en el AMBA

El Gobierno nacional comunicó que este mes dejará de pagar los subsidios por la Red SUBE en los colectivos que circulan exclusivamente en la provincia de Buenos Aires y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con lo que esperan ahorrarse al menos $13.500 millones por mes en subsidios que dejarán de otorgar a este servicio público. Según Nación, se trata de una medida que busca equiparar el servicio con lo que ocurre en el interior del país.

“En el marco del ordenamiento de subsidios al transporte, el Gobierno nacional definió terminar con los favoritismos hacia algunas jurisdicciones en relación con los recursos destinados a financiar al transporte y garantizar el federalismo y la igualdad de condiciones en todos los distritos”, sostuvieron desde Transporte. Así, Nación mantendrá los subsidios de líneas consideradas de “jurisdicción nacional” y por el que deberán responder las administraciones locales.

Firma

La Nación y la CABA firmarán un acuerdo hoy para el traspaso de 31 líneas con recorrido dentro de la Ciudad con el que esperan frenar el aumento del boleto.

Según se informó, el costo de cada viaje en la Ciudad de Buenos Aires es de $863, de los cuales el pasajero paga $371, la Nación aporta en subsidio $271 y el Gobierno porteño pone los restantes $221. Con el retiro de la subvención nacional, el pasaje debería tener un precio de $642 si el Ejecutivo porteño no se hace cargo de la diferencia.