El proyecto del oficialismo generó críticas de parte de la oposición a la gestión de Gobierno.
Un proyecto que pretende crear un centro de acopio de leña y carbón para repartir a comedores, escuelas y vecinos de bajos recursos generó una fuerte polémica en la última sesión de la Cámara de Diputados. Sucede que, la iniciativa puso en debate la situación de la infraestructura energética de la provincia. El oficialismo, debió reconocer que aún hay problemas en esta materia, pero defendió el proyecto. La UCR dijo que “es una vergüenza” que se tenga que debatir esa iniciativa, pero finalmente la acompañó y los libertarios la rechazaron. El debate tuvo momentos de tensión con fuertes cruces entre los legisladores.
El autor del proyecto Nicolás Zavaleta (Frente de Todos-Unión por la Patria) defendió la iniciativa al sostener que el gas “es uno de los servicios que más aumento” y que la Provincia “no tiene facultades para subsidiarios”. En este sentido, planteó que esta propuesta es “necesaria cuando se ve la cantidad de comedores que cocinan a leña y que peregrinan el campo buscando este elemento y también hay vecinos en el interior de bajos recursos que se calefaccionan con esto”.
Fue el diputado radical, Tiago Puente, el que disparó la polémica al sostener que “en pleno siglo XXI este proyecto nos está dando un cachetazo a la clase política en especial a los que gobiernan”. En este sentido, sostuvo: “Uno lo lee y dice ‘¿en serio vamos a estar legislando en este sentido? Cuando deberían proveerlos de un anafe con gas envasado”.
La oficialista Adriana Díaz salió al cruce de Puente destacando que “hay legisladores que están pensando y actuando frente a lo que le pasa a las comunidades” y afirmó que si hay que tratar este tipo de proyectos en este siglo es porque “hay causas que hay que mirar antes de sorprendernos”.
“Cómo será de necesario tener que legislar sobre este tema que hay que recordar que la Secretaría de Energía de la Nación desreguló el precio del gas envasado, por lo que ahora se fijan libremente. Esto significa que el 80% de la población de Catamarca tendrá un aumento de casi el 100% en la garrafa”, dijo.
El diputado Juan Carlos Ledesma (FT-UP) se sumó a la defensa del proyecto al sostener que “hay una realidad que se acrecienta todos los días un poco más”.
“Hay legisladores que pretenden sacar leña del árbol caído, pero hay que hacerse responsable y todos somos responsables de lo que le pasa al país. No podemos tener una mirada sesgada y este gobierno nacional también se tiene que hacer cargo de lo que pasa”, dijo.
La diputada libertaria, Analía Aguaisol, adelantó que el bloque iba a votar en contra del proyecto y cuestionó al oficialismo por la situación de las escuelas en el interior al sostener que no tienen gas para cocinarles a los alumnos. Su compañero y presidente del bloque, Adrián Brizuela aprovechó el debate para apuntar contra el gobierno provincial al sostener que “ahora se acuerdan del hambre” y agregó que “nadie asume que están hace 13 años en el gobierno provincial y estuvieron 16 en el gobierno nacional”. En este sentido, hizo mención a una información publicada por El Ancasti sobre giros millonarios a empresas del Estado. Así mencionó los depósitos a Producat SAPEM y a Radio y TV Catamarca para “salvatajes para el pago de sueldos”.
“Está claro cuáles son las prioridades del Estado provincial”, cerró.
Pablo Castro del oficialismo, tomó los planteos opositores al sostener que al gobierno provincial le gustaría estar ocupado en implementar nuevas tecnologías en las escuelas y no en cómo darle de comer a los alumnos, pero que “no podemos ser ciegos como sí lo hace el gobierno nacional a las necesidades del pueblo”.
La presidenta del bloque radical, Silvana Carrizo calentó aún más la polémica al sostener: “Debería darnos vergüenza estar legislando la entrega de leña a escuelas, comedores y las asociaciones”. En este sentido, cuestionó al gobierno por no avanzar en proyectos de infraestructura para conseguir más bocas de gas en la provincia. “Acompañamos el proyecto, pero esto no implica que no reconozcamos lo que está haciendo mal el gobierno nacional y provincial”, dijo.
La vicepresidenta de la Cámara, María Argerich, le contestó al indicar que desde el oficialismo se reconoce que hay falencia en materia de infraestructura. Pero planteó: “A mí me daría vergüenza ser funcional a la derecha, funcional a la SIDE, tener los alimentos estoqueados, desfinanciar a la obra pública. Vergüenza es tener un presidente que todos los días se ríe del país”.
Puente volvió a tomar la palabra para chicanear al oficialismo al sostener: “Ojala que los diputados que les gusta viajar por el exterior con el Gobernador en lugar de hacer esos gastos exorbitantes lo gasten en garrafas para los comedores”.
Finalmente, el presidente del bloque oficialista Gustavo Aguirre, apuntó a los planteos del radicalismo. “Vergüenza es la postura híbrida de querer quedar bien con todos, de aprobar el proyecto, pero hacer reservas como si ellos no hubiesen estado 20 años de gobierno”, dijo y añadió: “Esto forma parte de la situación de la UCR que lleva adelante un papel lamentable porque ellos salvaguardan su postura pero siempre son parte de los procesos neoliberales y del ajuste”.
El diputado también reconoció las falencias en infraestructura al sostener que “seguramente falta por hacer”, pero negó que “en la mirada de mercado encontremos la solución del problema tal como lo plantean algunos”.
Finalmente, defendió el proyecto al sostener que “en el interior los comedores funcionan a leña y van a seguir así porque es muy difícil llevar gas a lugares inhóspitos o de pocos habitantes”.