Catamarca apuesta a nuevas variedades de algodón para optimizar su producción agrícola
La Mesa Algodonera Provincial impulsa la reactivación del cultivo de algodón en la provincia con nuevas variedades y tecnologías, buscando diversificar la producción y fortalecer la economía local.
Catamarca está dando un paso importante hacia la diversificación y optimización de su producción agrícola con el cultivo de algodón, un cultivo conocido por su versatilidad y resistencia. Con el objetivo de revitalizar esta actividad histórica en la provincia, la Mesa Algodonera Provincial, constituida en 2022, llevó adelante un estudio exhaustivo sobre el comportamiento fenológico, sanitario y productivo de distintas variedades de algodón en diversas zonas de Catamarca.
Este grupo de trabajo incluye investigadores del Ministerio de Inclusión Digital y Sistemas Productivos, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Catamarca (UNCa).
El estudio, realizado en tres escenarios clave de la provincia –Capayán, Andalgalá y Tinogasta–, evaluó el rendimiento de siete variedades de algodón cultivadas a nivel nacional. Los resultados obtenidos de estos estudios comparativos proporcionaron valiosa información sobre la adaptación del cultivo en distintos climas y suelos, mostrando un desempeño superior en Andalgalá, donde se destacó tanto la productividad a campo como la calidad de la fibra.
Entre las variedades más destacadas se encuentran la “Porá 3 BGRR” y la “Guaraní BGRR”, reconocidas por su alto rendimiento y excelente calidad, lo que posiciona al algodón como una alternativa productiva prometedora para la provincia.
El proyecto, que también busca mejorar la rotación agrícola en la región, se centró en la evaluación de variedades con diferentes tiempos de desarrollo: corto (140-150 días), medio (160-180 días) y largo (+180 días). Si bien los resultados iniciales son muy alentadores, se continuará con nuevos estudios para confirmar la viabilidad a largo plazo de estas variedades en el contexto local. Los avances tecnológicos aplicados en estos ensayos, como las variedades transgénicas resistentes a insectos y herbicidas, abren nuevas oportunidades para optimizar tanto la siembra como la cosecha.
El cultivo de algodón fue un pilar económico en Catamarca entre las décadas de 1960 y 1970, especialmente en los departamentos del oeste de la provincia. Sin embargo, la actividad se interrumpió en 2001. Hoy, con la implementación de nuevas tecnologías y un enfoque renovado en la calidad de la fibra, se busca reactivar el cultivo como una alternativa viable, favoreciendo a los productores locales y estimulando la economía de la región.